MUROS PARA SEPARAR.

Todas las leyes y modelos que hoy se imponen, hablan de integración, de igualdad, de calidad en el diálogo, de la no discriminación, de la participación, en fin, todo tendiente a lograr la convivencia pacífica y tolerante entre nosotros.

No obstante,  hay sociedades, barrios, sectores, seres humanos que parece no entienden o no quieren respetar al otro como igual en derechos. Entonces se convierten en “jueces” de sus semejantes y los condenan, o le cierran el paso.

Así, de manera insólita, en Las Heras, Mendoza, vecinos “bien” hicieron construir una tapia, un muro, entre “su” barrio y una villa miseria, medida que fue aprobada por el Municipio que dirige Rubén Miranda. (mire la foto). Lo casi irrazonable es que los habitantes de la villa fueron los contratados como albañiles para levantarlo! "No me quedó otra, tengo que alimentar a mi familia y la única manera es trabajando acá", afirmó Diego Ruiz, uno de los hombres que, según dice, fue contratado por el propio "Municipio para hacer el trabajo".

Y por supuesto el “ejemplo cunde”. Ya hay otros sectores que están solicitando lo mismo.

"Lo que sucede es que pagan bien, no tengo trabajo y tengo que llevar algo de plata a mi casa", explica Ruiz, para quien la construcción del muro "no es la mejor forma" para ganarse la vida. La situación parece haber llegado a su punto límite. Por un lado, los vecinos del barrio policial afirman que están cansados de los hechos de inseguridad y aseguran que los robos a las viviendas son "algo frecuente". Mientras tanto, los habitantes del asentamiento –ahora aislado– admiten que hay personas conflictivas pero piden que no se los estigmatice a todos, ya que, en su mayoría, las que habitan en el lugar son familias trabajadoras.(literal del diario elsolonline).

Esta es sólo una muestra opaca de cómo los discursos dicen verdades y los hechos las desmienten.